
Maiwe espera tras la niebla la llegada de las focas. El viento frío le dibuja una sonrisa en la cara. Maiwe dejó atrás todo, para encontrarse con el mismo. Ahora sólo sueña cosas bellas por la noche. Olvidó ya lo que lo estaba matando. Su cuerpo, dejó de doler a toda hora. Pero hay algunos días en que se caga de frío. Igual sigue sonriendo. Maiwe espera callado la llegada de las focas.
2 comentarios:
Maiwen, una imagen amigable y tierna.
sALUDOS
con maiwe me tomaria una sopa de cabellos de ángel. may.-
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