miércoles, febrero 06, 2008

Volví. Del paraíso al asfalto.

Estuve en esa casita que se ve ahí arriba. Extrañando algunas cosas alla pero viviendo con los pies en la arena. Con el mar en los ojos y el viento en mis pequeñas orejas.

Matadeiro, otro lugar en el mundo pa llenarse de aire. De viento, de mar y por suepuesto de arena. (en los bolsillos, en todos lados).


Me impresionan mucho las formas de ciertas hojas de los árboles. Estuve varios días mirando este bananeiro hasta que lo dibuje con sus hojas secas y marrones en contraste con el verde intenso de las otras, bellísimo.