martes, noviembre 18, 2008

Tal vez Mónaco.


U otro lugar.

Bizarrolopedia del tren.


Frenéticas, lujuriosas, berborrágicas, analógicas y perfeccionistas. Las chicas del tren se frotaban, cascaban, empolvaban, ruborizaban.
Sin conciencia de las figuras traslúcidas que las miraban.
La chicas se lubricaban los labios con toneladas de reducción de baba de caracol.
Se prestaban los plumeros y las escobillas.
Hasta compartieron un destapador nasal.
Escupian pedazos de piel a sus pequeños espejitos que les prometian que eran las mas bellas del reino.

Basado en hechos reales vividos en el tren de Saavedra a retiro hoy por la mañana.