martes, noviembre 07, 2006

El encierro.


Fue la noche mas dura. La de las cuerdas lacerando la carne. La de los granos de arena rozando los ojos. La del suspiro que rebota en la pared. La de los oídos tapados. Esa noche, es la única que no puedo olvidar.


De mi libretita para el colectivo.

1 comentario:

Anónimo dijo...

el tinto con mucho alcohol metilico trae esas vivencias, tambièn vomitos y dolor de cabeza...