miércoles, abril 17, 2013
martes, octubre 16, 2012
viernes, octubre 12, 2012
miércoles, agosto 29, 2012
martes, agosto 21, 2012
v8!
V8 La leyenda del robot que salvó a la humanidad, manejado por su creador J. un pequeño niño de 10 años que aprendió a armar maquinas en la chatarrera de su abuelo.
martes, agosto 14, 2012
martes, julio 31, 2012
jueves, julio 19, 2012
Maiwe mide la posible trayectoria de sus flechas.
Antes de que empiece el crudo invierno Maiwe revisa sus enseres de cacería. Maiwe le pide a los dioses de la nieve que le provean de lo necesario para pasar el durísimo invierno, pero no deja de afilar sus flechas porque los dioses de la nieve proveen pero tampoco regalan nada.
Antártida.
Es un sueño que tengo, alguna vez ir a la Antártida. Pasar el rato nomas ahí entre el frío mas grande que te puedas imaginar. Y tal vez diseñar herramientas para que las usen ahí. Eso estaría muy bueno.
martes, julio 17, 2012
martes, julio 10, 2012
viernes, mayo 04, 2012
miércoles, mayo 02, 2012
Lejano mar.H
Hay un mar allá en el sur que no deja de sonar... de sonar en mis oídos. Un mar hecho de viento fuerte frío del sur.
martes, abril 10, 2012
El bueno de Dieter
Dieter habla con las manos, con los ojos, con el sentido de la estética. Habla con maderas, aluminios y pequeños agujeros. Habla enojado sobre como le arruinaron los autos los norteamericanos. Habla con paz sobre como el diseño le explica cosas al oído.
Dieter nos dice cosas que hay que saber escuchar.
Dieter rams.
viernes, enero 20, 2012
jueves, enero 12, 2012
miércoles, enero 04, 2012
martes, enero 03, 2012
viernes, diciembre 16, 2011
lunes, diciembre 12, 2011
Las copas.
Camaleón.
viernes, noviembre 11, 2011
Les calaveras.
lunes, septiembre 05, 2011
martes, diciembre 14, 2010
Ferramentas.
jueves, noviembre 18, 2010
Lelelosus.
Le había pasado todo, el hambre, el frío, la muerte, la carcel, la libertad, la guita y la pobreza. No le quedaba nada en el bolso, nada. Era un verdadero paria. Era una piedra más en el camino, un cero de izquierda.
Le quedaba de recuerdo una cicatriz cruzandole la cara, un beso en el recuerdo y el olor de la polvora del lado del que dispara, le decían sombra o cuzco.
Lo vieron pasar la vía del tren tipo 3 de la mañana. Encontraron su bolso, su revolver y una carta medio quemada escrita con letra violenta para sofía.
Sus huellas terminaban en la ruta, dos gotas de sangre, un grito escuchado a lo lejos y después el silencio.
miércoles, noviembre 03, 2010
miércoles, octubre 20, 2010
viernes, septiembre 17, 2010
jueves, septiembre 02, 2010
viernes, agosto 20, 2010
jueves, agosto 12, 2010
viernes, agosto 06, 2010
Momento de paz.
miércoles, agosto 04, 2010
Explicar lo inexplicable.
Lo tildaron de snob, de serio, de loco, de mimo, de soporifero, de sobreautoestimado, de timador, de tartamudo, de sueñero, de imbécil, de corto, de genio, de aburrido, de memo, de pelotudo a secas, de forro, de que andaba en algo raro, de viejo hipócrita, de salamero, de chamuyero, de vende-patria, de cargoso, de sisifo, de moderno, de progre, de fasista, de miope, de cerrado, de abierto, de artista, de poeta, de ido, de drogodependiente, de fatalista, de cuerdo, de trolo, de poliglota, de mugriento, de generoso, de agarrado, de pobre, de rico venido a menos, de injusto, de leguleyo, de pendeviejo, de demagogo, de pulcro, de mago, de borracho, de torpe, de insoportable, de hijo-de-una-gran-puta, de semiologo en potencia, de historiador del barrio, de lumbrera del pensamiento.
A él le gustaban las palabras, disfrutba diciendolas. Moviendo sus manos en el aire, describía, opinaba, arreglaba el mundo y lo desarreglaba. Era todo eso y mucho mas, era el explicador de lo inexplicable. La diferencia estaba en el oído del que supiera o no escuchar.
Ya no se lo ve tanto por el barrio, ya que se pierde que lo perdimos.
martes, agosto 03, 2010
Los Bomberos.
Cuando yo era pibe en el barrio había pequeñas "modas" que tomaban por sorpresa a todos, y todos comenzaban a practicar diferentes actitudes o a usar diversas vestimentas. Hubo años de bicivoladores, skate, rockeros, hippies y hasta fanáticos de la ecología. pero la moda que mas problemas y alegrías nos trajo fue el cope con los bomberos. Fueron sólo dos semanas en las que todos los pendejos querían ser bomberos, ibamos todos a ver los camiones, los autobombas, preguntabamos cosas, ayudabamos a cargar de agua los tanques, limpiabamos, barriamos y nos sentiamos bomberos. tanto que empezamos a participar activamente de pequeños simulacros, apagamos los asados cuando terminaba la noche, revisabamos los enchufes para chequear que no produjeran un corto circuito.
El tiempo pasaba lento en las vacaciones así que nos entraban las ganas de, por fin, apagar un incendio. Los días pasaban y como la ni la sequía, ni los piromaniacos atacaban ese verano. Algunos de los pibes comenzaron a pensar un plan de organización para estar preparados. Los animos no sedían aunque los días eran cada vez mas largos. El tiempo fue pasando y se nos fueron yendo las ganas hasta que por fin pasó, el primer incendio del barrio en una casa abandonada. Lo apagamos solitos, para cuando llegaron los verdaderos bomberos, la primer escuadra de pequeños bomberos ya había apagado el fuego, salvado un gato, y clausurado el edificio en pocos minutos. Fue tanta la adrenalina y la felicidad del momento que de ahí en adelante no paramos de incendiar y apagar pequeñas casas, matorrales y hasta un kiosko. Tanto fue el cope que tuvimos con esa moda, que 16 de los 20 pibes terminaron en la comisaria, dos siguieron quemando la patagonia en diferentes lugares por dos años mas. Sólo yo y emilio pudimos mantenernos al margen de todo alegando que nunca, en realidad, quisimos ser bomberos.
Lo que nadie supo es que no queriamos ser bomberos, no queriamso apagar el fuego sinó prenderlo y dejarlo libre nomás. Hoy por la mañana 18 años después me llamó emilio, por fin vamos a cumplir lo prometido hace tantos años y aprovechando las vacaciones vamos a prender de una vez por todas la escuela.
El tiempo pasaba lento en las vacaciones así que nos entraban las ganas de, por fin, apagar un incendio. Los días pasaban y como la ni la sequía, ni los piromaniacos atacaban ese verano. Algunos de los pibes comenzaron a pensar un plan de organización para estar preparados. Los animos no sedían aunque los días eran cada vez mas largos. El tiempo fue pasando y se nos fueron yendo las ganas hasta que por fin pasó, el primer incendio del barrio en una casa abandonada. Lo apagamos solitos, para cuando llegaron los verdaderos bomberos, la primer escuadra de pequeños bomberos ya había apagado el fuego, salvado un gato, y clausurado el edificio en pocos minutos. Fue tanta la adrenalina y la felicidad del momento que de ahí en adelante no paramos de incendiar y apagar pequeñas casas, matorrales y hasta un kiosko. Tanto fue el cope que tuvimos con esa moda, que 16 de los 20 pibes terminaron en la comisaria, dos siguieron quemando la patagonia en diferentes lugares por dos años mas. Sólo yo y emilio pudimos mantenernos al margen de todo alegando que nunca, en realidad, quisimos ser bomberos.
Lo que nadie supo es que no queriamos ser bomberos, no queriamso apagar el fuego sinó prenderlo y dejarlo libre nomás. Hoy por la mañana 18 años después me llamó emilio, por fin vamos a cumplir lo prometido hace tantos años y aprovechando las vacaciones vamos a prender de una vez por todas la escuela.
Sigue probandoooo!!
lunes, agosto 02, 2010
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